El método de microondas para la erradicación de escarabajos de la madera y otras carcomas permite afrontar con éxito este problema incluso en invierno a bajas temperaturas. La exposición al campo de microondas destruye a todos los huéspedes indeseables sin causar ningún daño a la madera ni a la zona circundante. A diferencia de los métodos térmicos convencionales, el campo de microondas afecta directamente al material tratado sin calentar el aire circundante. Los dispositivos que generan ondas electromagnéticas excitan las vibraciones de las moléculas de agua tanto en los insectos como en la madera. El movimiento, la oscilación de las moléculas y, por tanto, la energía térmica. Esto permite que la madera se caliente a la temperatura que necesitamos a 56°C, suficiente para matar a los xilófagos (plagas de la madera como el escarabajo longicornio, el
escarabajo de la madera y otras carcomas). Los procesos de calentamiento de materiales mediante campos de microondas se desarrollan mejor donde hay más moléculas de agua. Los organismos vivos (los insectos, como en nuestro caso) contienen un 70-90% de agua y, al ser expuestos al campo de microondas, se calientan mucho más intensamente que la madera en la que se desarrollaban, lo que supone una
garantía absoluta de destrucción rápida y completa.